El CHICO QUE AMA A LAS PELICULAS
Cuando allá
por los fines de los cuarenta y principio de los cincuenta
Los chicos
que habíamos aprendido a leer y podíamos de este modo
descubrir el
mundo mágico de las letras, los libros y revistas fueron para
muchos, el
pasaporte para los sueños. Toda la colección Billiken y los cuentos
De
Tarzán, Sandokan, Los tres mosqueteros y los entrañables amigos de
Luisa
M.Alcott (Mujercitas,Hombrecitos,8 primos,Los muchachos de Jo, Etc…
nos
permitieron salir de la rutina de los juegos o escuchar la radio.
Si bien este
medio de comunicación, fue, y sigue siendo para mí, el mejor incentivo para estimular la imaginación
.Pronto habríamos de encontrarnos con algo que nos ponía ante los ojos personas
que recreaban prácticamente todas las circunstancias de la vida : El cine .
Me atrapó
desde el vamos, fue mi primer amor. En la oscuridad complice de la sala era, Tarzán, Dartagnan, El Zorro y otros tantos viejos
conocidos del
papel que
cobraba formas y desde la pantalla me invitaban a participar de la fiesta. Sin
lugar a dudas era la mejor de las fiestas .El regalo que, primero con mis
padres, y luego con mis amigos celebrábamos
todos los sábados en los cines del barrio. Allí por lo general veíamos tres
películas, por supuesto aptas
para menores
ya que se daban en matiné. Una de cowboys, una de piratas y otra de temas
familiares que tenían casi siempre
a Spencer Tracy y Mikey Rooney como
protagonistas.La noche era para los grandes con señoras
voluptuosas
y galanes recios y donde…
no sé como
contarlo, se daban BESOS!!!
Continuará. R.LL.
Comentarios
Publicar un comentario